Legionella

La legionella (legionella pneumophila) es una bacteria que tiene sus reservorios naturales en un ambiente húmedo del 1%. Pero puede llegar a colonizar el agua potable que abastece las ciudades. Si las condiciones naturales para su propagación son idóneas (temperatura 20-45ºC, pH ácido, humedad de más de 65%, presencia de oxígeno, protozoos y algas); las bacterias se pueden multiplicar hasta niveles peligrosos para la salud humana.

Si el agua contaminada llega a instalaciones donde se aplican aerosoles; la legenionella penetra en los pulmones de las personas tras ser respirada y desarrollar una enfermedad. Llegados a ese caso, deberías ponerte en contacto con una empresa de control de legionella.

Esta enfermedad se contrae por medio de las vías respiratorias. Debido a la inhalación de aerosoles o aspiración de agua que contiene bacterias de legionella en cantidades elevadas.

Los aerosoles son formados por diminutas gotas de agua que se generan al pulverizar el agua o provocar burbujas de aire a través de ella. Cuanto más pequeña sea la gota, más peligrosa es, ya que las gotas de menos de 5 µ llegan más fácilmente a las vías respiratorias al inspirar aire. Por ello el tratamiento de zonas infectadas debe ser minucioso, preciso y profesional, siempre a manos de una empresa de control y tratamiento de la legionella.

La posibilidad de contraer la enfermedad dependerá de la cantidad de concentración de la bacteria; el tipo y la virulencia de la misma en el aerosol; y el tiempo de exposición. Hasta el momento, no hay evidencia que la bacteria se propague de persona a persona, por exposición o por ingestión. Antes de llegar a una situación de riesgo, acude a una empresa de control de legionella en Talavera de la Reina. ¡Ponte en contacto con nosotros!

Como empresa de control y tratamiento de la legionella, compartimos estos consejos para que sepas como prevenirla, actuando sobre 3 etapas relacionadas entre sí:

• Vía de entrada, controlando la cantidad de agua que entra en la instalación. Ha de poseer un control de calidad, con una concentración de cloro residual y con garantías de su calidad microbiológica.
• Evitar la multiplicación en el interior de la instalación, impidiendo y controlando las condiciones que pueden favorecer su reproducción (temperatura, nutrientes) mediante limpieza y desinfección.
• Evitar o disminuir la aerosolización, controlando así la generación y vertido de aerosoles (en torres de refrigeración, incremento de la gota de aerosoles).